viernes, 29 de enero de 2010

¿Quién dijo miedo?

Llevo una semana como asesora-comercial de ventas de una empresa de formación. Esta empresa se encarga de gestionar los créditos de formación de la S.S. Estos créditos los "paga" la empresa por cada empleado que tiene y la S.S. se los "devuelve" como cursos de mejora de las habilidades de los empreados... hasta aquí todo bien... El problema es que algunos empresarios no quieren que sus empleados hagan uso de estos créditos (¿Quién sabe por qué?) o no tienen tiempo para atenderte... Por mucho que insistas en la gratuidad del curso, o en la facilidad para hacerlo en casa a distancia y con tranquilidad, no hay quien les haga firmar el contrato de gestión del crédito... Un trabajo complicado pero ¿Quién dijo miedo?...

sábado, 23 de enero de 2010

Literatura

Hay libros que te marcan… Unos porque, aún siendo obras de arte de la literatura, te obligaron a leerlos en el colegio, el instituto o la universidad y eso hizo que no gustasen nada o incluso se odiaran (en mi caso “El Quijote” que me marcó para mal por culpa del profesor de literatura). Y otros libros, aún no siendo tan buenos desde el punto de vista de la crítica literaria, te hacen recapacitar, sentirte bien, ser mejor persona… o simplemente te sirven de apoyo en un momento preciso de tu vida y los recuerdas con cariño…
Hace unos años, para mi, ese punto de partida de una nueva manera de ver la vida fue “Temor y Temblor” de Søren Kierkegaard. Un libro de filosofía, con un toque romántico y religioso… una lectura interesante de la que se pueden extraer muchas ideas. Y sin duda este párrafo es la mejor muestra que se me ocurre (la llevo allá dónde voy):
“No será olvidado quien fue grande en este mundo, y cada uno de nosotros ha sido grande a su manera, siempre en proporción a la grandeza del objeto de su amor. Pues quien se amó a sí mismo fue grande gracias a su persona, y quién amó a Dios fue, sin embargo, el más grande de todo. Cada uno de nosotros perdurará en el recuerdo, pero siempre en relación a la grandeza de su expectativa: uno alcanzará la grandeza porque esperó lo posible y otro porque esperó lo eterno, pero quien esperó lo imposible, ese es el más grande de todos. Todos perduraremos en el recuerdo, pero cada uno será grande en relación a aquello con que batalló. Y aquel que batalló con el mundo fue grande porque venció al mundo, y el que batalló consigo mismo fue grande porque se venció a sí mismo, pero quien batalló con Dios, ese fue el más grande de todos…”
Søren Kierkegaard. Temor y Temblor.

sábado, 9 de enero de 2010

La música es una parte muy importante de mí, tanto que con música se pueden “cantar” muchas cosas de mi vida…
“Dicen que soy un libro sin argumento. Que no se si vengo o voy. Que me pierdo entre mis sueños… una chica normal. Con pequeñas manías que hacen desesperar… No soy tu cenicienta. No soy la última pieza de tu puzzle sin armar. No soy quien ideaste…Y esta soy yo, asustada y decidida. Una especie en extinción. Tan real como la vida. Y esta soy yo. Ahora llega mi momento. No pienso renunciar. No quiero perder el tiempo” (Esta soy yo, El Sueño de Morfeo)

Un momento mágico, muy real… el principio de una experiencia intensa que terminó siendo una amistad llena de cariño…
”Bendito el lugar y el motivo de estar ahí. Bendita la coincidencia. Bendito dios por encontrarnos en el camino… Bendita la luz de tu mirada... Benditos ojos que me esquivaban, simulaban desde que me ignoraban y de repente sostienes la mirada… Oh gloria divina de esta suerte y de encontrarte justo ahí en medio del camino. Gloria al cielo de encontrarte ahora llevarte mi soledad y coincidir en mi destino en el mismo destino…” (Bendita tu luz, Maná)

También he tenido momentos de desengaño… muchos… aunque no como el del verano pasado…
“Sentado en lo alto del tejado, donde no espero a nadie, miles de preguntas se amontonan y tu no vas llegando. Tu sinrazón no sabe de nadie. Hoy el perdón no entiende de bailes. Llevo varios días paseando sin parar por tu mente. Busco la respuesta y no comprendo tu forma de marcharte. Que voy hacer sin poder hablarte, como volverte a ver, como inventarte… Pierdes la paciencia y yo la entiendo, pero no se esperarte, cuento lo que queda y solo pienso donde pude fallarte…”(Que me queda, Antonio Orozco)

Pero la vida sigue y al final se vuelve a encontrar el amor (o algo que se le parece)…
“…Tienes esa maldita fuerza que me ha enganchado y no me va a soltar. Tu olor me inspira. Tu voz me incita a que mi risa nazca sin pensar, a que mi estómago esté cerrado y me hago daño porque se que no estás… Si pudiera tenerte y quererte a la vez. Si tuviera tu amor no lloraría por ver que no te tengo y me pierdo y te quiero tener. Si estuviera a tu lado moriría por ser ese que cuida de ti ese que sueña con ser tu amor eterno ese trozo que quiero tener…” (Y si pudiera tenerte, El canto del loco)

y toca luchar…
“Pues no sabes cuanto tiempo en mis sueños has vivido. Ni sospechas cuando te nombré. Yo, yo no me doy por vencido. Yo quiero un mundo contigo. Juro que vale la pena esperar, y esperar y esperar un suspiro. Una señal del destino. No me canso, no me rindo, no me doy por vencido… Porque estoy tan sólo a un paso de ganarme la alegría. Porque el corazón levanta una tormenta enfurecida. Desde aquel momento en que te ví… Este silencio esconde demasiadas palabras. No me detengo, pase lo que pase seguiré…” (No me doy por vencido, Luis Fonsi)

aunque se sepa que la victoria está lejos…
“Una vez soñé que en algún lugar yo podría ser alguien si lograse amar… Un día llegare. No importa la distancia. El rumbo encontrare. Y tendré valor. Paso a paso iré. Y persistiré. A cualquier distancia yo el amor alcanzare…Una vez te vi. Era todo irreal. Y aunque fuese un sueño te sentía junto a mí. Se que estas ahí… No importa la distancia. A cualquier distancia yo tu vida y tu amor tendré”(No importa la distancia, Ricky Martin)

Y se quiera vivir este amor sin más…
“Nada es para siempre amor. Hoy nos toca compartir la misma luna y mañana quién sabrá sí hay una separación o habrá fortuna. Nadie sabe amor. Nadie sabe que podrá pasar mañana. Quiero amarte hoy. Quiero abrir todas las puertas de mi alma. Te quiero hoy… Quiero amarte hoy, quiero amarte hoy, por si no hay mañana…” (Nada es para siempre, Luis Fonsi)

viernes, 8 de enero de 2010

La vida con Peter Pan...

Hace un par de años Wendy Darling conoció a un chico y conectaron considerablemente bien desde el primer momento. No sé como pero el caso es que empezaron a tener una especie de relación que no iba a ninguna parte porque ninguno quería que fuera más allá de dónde iba: a ninguna parte. Y ella feliz! No lo quería como novio, le sobraba con ser su amiga-amante, y punto! Él, Peter Pan, se divertía con Wendy pero de repente le soltó un 'hasta aquí hemos llegado y no hay más camino que recorrer'.

¿En que momento Peter cambió de opinión sobre Wendy? ¿Fue cosa de Campanilla?...
Es cierto que en la cabeza de Wendy había rondado alguna vez la idea de formalizar la relación con Peter, pero como sabía de que pie cojeaba el muchacho no dijo nada. Ella era feliz jugando con Peter así que el punto y final no le sentó nada bien, aunque se lo veía venir…Wendy hizo las maletas y volvió a casa con una sensación extraña.

¿Peter le había leído el pensamiento aunque ella no quería hacerlo realidad? ¿Acaso Peter no sabía que los sueños son sueños y Wendy sabe que no todos se pueden hacer realidad?…

Rehaciéndose del disgusto estaba Wendy cuando supo que las fuerzas de Nunca Jamás habían captado a uno de sus mejores amigos y que este no quería ser rescatado… Wendy durante una temporada se había sentido atraída por este amigo y se llevaban tan bien que la posibilidad de tener una relación seria siempre les había rondado –los rumores sobre que esa relación había existido también les perseguía-. No es que ahora ella quisiera tener esa relación con este chico, más bien quería tenerlo cerca como lo tenía antes, pero como el muchacho quiere vivir en Nunca Jamás y Wendy no sabía bien que hacer al respecto…

¿Sería capaz de ser de nuevo su amiga, como entonces lo eran, sin que la sombra del primer Peter Pan la persiguiera? ¿Sería más interesante ser la Campanilla de este Peter Pan que seguir de Wendy? Como mínimo esta última opción era una idea tentadora…

Wendy al final no hizo nada... ni rescatar al amigo ni convertirse en su Campanilla... se quedó quieta, sin ganas de actuar... sin el ánimo suficiente como para luchar contra las fuerzas de Nunca Jamás...

Hoy baraja de nuevo la idea de hacerse pasar por Campanilla y "capturar" a un nuevo Peter Pan, con el que tener algo más allá de la amistad, pero sabe que "el primer instante en el que se reconocieran como amantes, sería también la última vez que fueran amigos" y eso la aterra...